Reseña: La flecha en el aire. Diario de la clase de filosofía. Ismael Grasa

Título: La flecha en el aire. Diario de la clase de filosofía.

Autor: Ismael Grasa

Temática: Ensayo

Editorial:  Debate

Año de edición: 2011 

Páginas: 208

Formato: Tapa blanda con solapa

ISBN: 978-84-9992-053-5

Precio: 16,90

Sinopsis:

Los cuadernos de clase de un escritor metido a maestro, donde reflexiona sobre la filosofía, la enseñanza y la enseñanza de la filosofía.

Hace seis años leí en la sección de anuncios de un periódico que se necesitaba “un filósofo”. No dejó de parecerme algo singular. Yo buscaba trabajo, así que, también un poco por curiosidad, llamé. Me explicaron que se trataba de un colegio. El profesor de Filosofía de bachillerato se había ido y hacía falta alguien que le reemplazase. Me citaron para una entrevista y durante las horas previas estuve dudando sobre si asistir. Mi licenciatura oficial es de Filosofía, pero lo cierto es que nunca había pensado en dedicarme a la enseñanza, y menos de adolescentes.
Hoy, cuando escribo esto, estoy en mi sexto curso como profesor del colegio. En este tiempo creo que he aprendido algunas cosas sobre filosofía y también sobre cómo dar una clase. Durante varios de estos cursos llevé una especie de diario de profesor, cuadernos en los que iba anotando los asuntos de los que trataba en las clases y el día a día. Aquellas notas son las que componen este libro. Enseñando, he ido descubriendo a la vez dónde me encontraba –o dónde ya no quería encontrarme–, y qué cosas considero importantes y merecedoras de ser defendidas. Y de eso es de lo que creo que trata este libro.

Opinión personal:

Me ha resultado un libro decepcionante. Lo cierto es que esperaba un poco más de él, lo suficiente como para considerarlo "regular", pero la verdad es que no me esperaba que estuviese tan lleno de tópicos y fuese tan aburrido.

Independientemente del hecho de que estoy completamente en desacuerdo con las ideas del autor, el libro, en sí mismo, no me ha gustado nada, me ha dejado con un regusto amargo. Son los riesgos que corres al leer algo de índole más bien personal, donde el autor vuelca sus opiniones e ideas. Y, en cierta forma, también te deja un poco indiferente. En definitiva, un libro que es mejor olvidar.

Pues bien, en el libro, un profesor de instituto (el autor) expone sus ideas sobre diversos puntos,  sobretodo en cuestión de política y derechos humanos, siempre con supuestos argumentos filosóficos y de fondo una clase de filosofía.

La razón de mi decepción no es otra que mi esperanza de que por una vez apareciesen reflejadas las opiniones de los alumnos en un libro escrito por un profesor, pero nuevamente, esto no ha ocurrido. El autor (el profesor) se dedica a exponer sus opiniones, y de vez en cuando, muy de vez en cuando, deja oír alguna de las ideas de alguno de sus alumnos, rápidamente contrarrestada por el profesor, quien, por supuesto, en su libro acaba teniendo razón, aunque siempre según sus propios argumentos, infravalorando las opiniones de los alumnos que él no comparte.

En resumen, que como me aseguraba la contraportada, esperaba ver un poco más de las ideas y opiniones de los alumnos, y cómo estos también pueden ejercer cierta influencia, por mínima que sea, en el profesor, pero me he vuelto a encontrar de nuevo con la autoridad de un profesor declarando al  mundo su ideología.

Las pocas veces que intervienen los alumnos es para quedar en mal lugar, para quejarse de las clases, ser "conflictivos", o hacer comentarios racistas. ¿Es esta una visión realista de los jóvenes de hoy en día? Creo que muchos de los que me leéis sabéis que no, ya que pertenecemos a ese grupo que aún está estudiando o ha dejado las aulas hace poco. El autor podría haber plasmado mucho más y mejor los diferentes aspectos (muchos de ellos buenos) de la juventud de nuestra época, si no hubiese estado tan cegado con sus propias opiniones.

El libro se divide en capítulos muy cortos, de dos hojas como máximo, que comienzan con algún suceso acaecido en el instituto, pasando posteriormente a "instruirnos" (aunque se disfrace de reflexión, el autor intenta imponer sus ideas como verdaderas e incuestionables) con sus opiniones sobre diversos temas.

Si no tienes unos conceptos básicos de filosofía, es probable que el libro te aburra. Es otra de las razones por las cuales me ha decepcionado. A mi me gusta mucho la filosofía, y también esperaba encontrar más de esta en el libro, sin verse enturbiada por opiniones de ninguna clase, ya que otro hecho que me molesta es que utilice la filosofía como pretexto para imponer sus ideas.

En definitiva, es un libro que a lo mejor gusta a aquellos que son o han sido profesores, porque quizás se ven reflejados en la figura del autor, por aquello del compincheo entre colegas del mismo oficio. Aunque espero que no, ya que no creo que estén de acuerdo con muchas de sus ideas sobre los métodos de enseñanza y la idea que tiene el autor de lo que es la enseñanza.

Puntuación:

Gracias de todas formas a Random House Mondadori por el ejemplar.